El tiempo que falta hasta el juicio de Isabel, 28 de octubre, que fue aplazado el pasado día 8 de julio ante la incomparecencia de dos de los socios gestores actuales del Hotel, también se le va a hacer largo a estos individuos amigos de lo ajeno y de las tropelías ilegales. Será un largo peregrinar para los infractores y abusadores hacia los derechos básicos de los trabajadores que desearan tanto como Isabel que llegue el día del juicio y que por fin sea la justicia la que ponga las cosas en su sitio, abonándole las ingentes cuantías que le adeudan, cotizando el tiempo trabajado hasta la fecha de la sentencia y regularizando totalmente la situación laboral devolviéndole su empleo como recepcionista.
Estos individuos que primero actúan como Vidal Calatayud y posteriormente se montan un chiringuito con un capital de 1002€ cada uno, son pieza fundamental en el pleito ante el entramado tejido para intentar escurrir sus responsabilidades, que incluso suponen un ilícito penal contra los derechos de los trabajadores/as, cuestión sobre la que en su momento se deberá pronunciar su señoría y el Ministerio Fiscal. La huida hacia adelante retrasando el juicio solo les va a ocasionar el aumento de la deuda y por ende el encarecimiento del coste de una actuación absolutamente irracional por su parte.
Con los medios a nuestro alcance vamos a seguir intentando mantener cubiertas las necesidades básicas de Isabel García, que como se recordará no tiene ningún tipo de prestación, está al borde del desahucio a manos del Banco de Santander y es separada y madre de cuatro hijos.
CGT MÁLAGA