El hospital de Bellvitge se ha caracterizado en los últimos años por las protestas, por un aumento exagerado de los mandos intermedios, precariedad laboral, listas de espera y una cosa gravísima: la derivación de intervenciones quirúrgicas hacia clínicas privadas.
A fecha de junio el hospital de Bellvitge ha derivado, solamente este año, la cifra de más de 1.000 pacientes, la mayoría de estas derivaciones van a parar al hospital (privado) Sagrado Corazón. Curiosamente este hospital, perteneciete al grupo IDC salud, sí que ha recibido este año varios premios TOP 20. Les enviamos una cartera de pacientes y encima se paga con dinero público, increíble, ¡QUÉ CHOLLO!
Exigimos al gerente Alfredo García que renuncie a su cargo, que se niegue a derivar pacientes que pertenecen al hospital de Bellvitge a la clínica privada mientras nuestros quirófanos y plantas de hospitalización siguen cerradas.
Pedimos también a los jefes de servicio que denuncien la derivación de pacientes y que se nieguen a ofrecer listados de pacientes para que se les derive a la sanidad privada. Derivar es privatizar. No al negocio de la sanidad.
Sección Sindical CGT Bellvitge
Más información:
http://cgtcatalunya.cat/spip.php?article10714#.VGokuMlc_TB